Argumentó que Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez, “están juntas, bien resguardadas” y que “escuchan música, toman mates y se divierten”
Ramón Dupuy, el abuelo del niño Lucio Dupuy, quien el 26 de noviembre pasado fue asesinado a golpes en Santa Rosa, La Pampa, por su madre, Magdalena Espósito Valenti, y su pareja, Abigail Páez; manifestó públicamente su malestar por las condiciones en las que las acusadas están en el Complejo Penitenciario 1 de San Luis: “Están de vacaciones”.
“No están presas. Están juntas, bien resguardadas, fuera de las otras detenidas que hay. Escuchan música, se divierten y toman mates, no están presas como deberían estar”, argumentó.
El hombre contó también que le solicitaron al juez Daniel Ralli que las mujeres permanezca en prisión separadas sin contacto entre ellas para evitar que tracen una estrategia de defensa, pero la petición fue denegada: “No importa que estén juntas porque van a pagar lo mismo. Armar no pueden armar nada, los hechos están sobre la mesa porque a mi nieto lo mataron entre las dos. Están todas las pruebas y no se puede hacer más nada”.
Y agregó: “A mi no me prometieron de que no las iban a poner juntas. Cuando se armó aquí en Santa Rosa el desbande de la noticia de que las querían asesinar, las sacaron a las 4 de acá y las llevaron a la penitenciaría de San Luis juntas y quedaron alojadas juntas”.
Por último, reiteró que desconocía lo que Espósito Valenti y Páez hacían con Lucio porque, de lo contrario, hubiese actuado: “Yo vivo a 140 kilómetros de donde llevaron a mi nieto y puedo asegurar que, aunque me hubiese costado, me iba caminando a buscarlo si me hubiese enterado de lo que estaba pasando. Todo el mundo pregunta si no sabíamos o lo vimos, y no lo sabíamos ni lo vimos. No pensamos nunca que iban a hacer semejante aberración con nuestro nieto”.
El caso
Lucio fue asesinado a golpes el 26 de noviembre de 2021 y por el hecho fueron detenidas su madre, Magdalena Espósito Valenti, y su pareja, Abigail Páez; de 24 y 27 años respectivamente.
Tras su muerte, se determinó que el niño había sido asistido al menos cinco veces en un lapso de tres meses por politraumatismos en distintos centros asistenciales de La Pampa, aunque no había denuncias de profesional alguno al respecto ni de las autoridades del jardín de infantes al que asistía.
Valenti y Páez fue detenidas en la comisaría 6ª de Santa Rosa. Sin embargo, tras un ataque a la dependencia la Justicia decidió trasladarlas al Complejo Penitenciario 1 de San Luis. Ambas permanecen con prisión preventiva mientras la fiscal Verónica Ferrero desarrolla la investigación y llegarán al juicio en esa condición.
La madre de Lucio está acusada de homicidio calificado por el vínculo, para el cual se prevé la pena única de prisión perpetua. Su pareja, en tanto, de homicidio simple, delito con una escala punitiva de 8 a 25 años de cárcel.