En Pedro Juan, una pequeña ciudad de Paraguay, Liliana soñaba con convertirse en médica, pero su familia tenía dificultades económicas y la universidad privada era imposible de pagar. Sin embargo, la dedicación y el amor de su madre, ña Lili, cambiaron todo.

Para ayudar a su hija a pagar los estudios, ña Lili comenzó a vender chipa (una especie de pan de almidón de mandioca típico de Paraguay) por las calles de la ciudad. Haya lluvia o sol, ella estaba allí vendiendo pedazos de torta por solo 1.000 guaraníes, mientras que Liliana se concentraba en sus estudios y su sueño de convertirse en médica.

Cuando llegaba a casa después de vender, ña Lili contaba cuidadosamente cada moneda y billete que había ganado. Pero siempre estaba agradecida por lo que había conseguido. "Gracias, mi Dios", decía.

Liliana trabajaba duro también. A veces trabajaba como cajera en un supermercado y hacía fotocopias de los libros de la universidad para poder seguir estudiando. Además, se destacó en la facultad y se graduó como la mejor de su clase.

Después de tanto sacrificio, ña Lili no pudo contener la emoción cuando su hija se graduó. "Vamos a entrar al baile y voy a bailar contigo", le dijo. Liliana, por su parte, se sintió profundamente agradecida por todo lo que su madre había hecho por ella. "Nunca voy a poder pagarle todo lo que dio por mí", dijo. "Es la definición más perfecta de lucha, garra y valentía que puedo encontrar en mi vida".

La historia de ña Lili y Liliana es un ejemplo inspirador de amor, dedicación y perseverancia. Su historia muestra la importancia del apoyo familiar en la consecución de los sueños y metas, y cómo el sacrificio puede ser una fuerza poderosa para superar cualquier obstáculo y lograr el éxito. La historia también destaca la importancia de la educación y la perseverancia en la superación de las dificultades y la consecución de objetivos.