Este domingo, por la madrugada, un hombre agredió físicamente a un grupo de mujeres que estaban cerca de una “canchita” en el barrio “El Lince'', zona sur de la ciudad de San Luis. Al llegar la policía, quién fué alertada por unos vecinos que intentaron protegerlas, ésta no actuaba y sólo observaba cómo el hombre continuaba golpeandolas.
Luego de unos minutos, una mujer policía se acerca a Tania, una de las jóvenes abusadas, para decirle que subiera al patrullero con el objetivo de ser trasladada a la comisaría seccional 38 para realizar una denuncia al agresor, al cual ellas no conocían ni estaban vinculadas.
Tania nos contó que aceptó, subió al patrullero y a 400 metros del hecho, los policías solicitaron a una persona, que estaba transitando por la calle y quién no había presenciado el conflicto, que saliera de “testigo”. Sin embargo, en el suceso había más de 10 personas que podrían haber atestiguado.
Según Tania, el supuesto testigo recibió información por parte del personal policial para que diga que la joven detenida había hecho resistencia a la autoridad y había querido romper el móvil, por lo que ésta quedó detenida.
Perdió 9 semanas de embarazo en la celda.
La jóven, según dijo, estaba cursando un embarazo de 9 semanas, por lo que, en medio de la angustia y los golpes recibidos, comenzó a sentir fuertes dolores pélvicos.
Luego descubre que estaba sangrando y solicita ayuda a los policías. Les cuenta que estaba embarazada y, al parecer, estaba teniendo una pérdida. Los oficiales le piden que se calle sino iban a tener que reprenderla, le niegan higienizarse y, en consecuencia, ella toma la decisión de detener la hemorragia con un par de medias que llevaba puesta. Estuvo 18 hs detenida (de las 3:00 a las 21 hs), le quitaron el calzado, por lo que quedó descalza, le pidieron que se bañara con agua fría y, al salir, fué al hospital en ambulancia pero ya era demasiado tarde, Tania ya había perdido a su hijo.
“Como a las 7:00 hs les pedí si me podían dar una toallita femenina para parar un poco la hemorragia y no me ayudaron, tuve que limpiarme con las medias que llevaba puestas en ese momento. Luego, me hicieron bañar con agua fría y me dejaron descalza toda la noche dentro de la celda”, dijo Tania.
“Me pidieron que le quitara los cordones a las zapatillas pero éstas eran de elástico, por lo que el policía quiso romperlas y cómo le dije que no lo hiciera porque era el único par que tenía, me las quitó”, agregó.
Tania quiere dejar en claro que ella no tenía ningún vínculo emocional ni sanguíneo con la persona que la agredió en primera instancia, nunca se resistió ni le hizo daño a ningún vehículo. Es más, me sentía muy mal, agregó.
Finalmente la joven, acompañada de su mamá, pudo realizar la denuncia en asuntos internos. Ella deberá llevar los testigos reales para que digan “ la verdad”.
“Ojalá que todos los policías que hicieron abandono de persona paguen por esto, porque a mi bebé nadie me lo va a devolver lamentablemente”, dijo Tania.
Fuente y video: Mediador en red. Nota: Redacción SLN.