El juez de Garantías N° 3 de la ciudad de San Luis, Marcos Flores Leyes, ha dictaminado que un joven de 18 años acusado de homicidio calificado por el vínculo en grado de tentativa permanezca detenido bajo prisión domiciliaria y monitoreado electrónicamente con una tobillera por un plazo de 120 días. La víctima de la agresión fue su padre.
La medida de coerción se cumplirá en la vivienda de la madre del imputado, ubicada en el barrio Libertad. Dado que el joven tiene problemas de consumo, principalmente de alcohol y pastillas, el magistrado ha ordenado que se comunique su situación al Hospital Escuela de Salud Mental para que le den ingreso y pueda comenzar un tratamiento por sus adicciones.
Además, desde el Juzgado se oficiará al Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Seguridad, para la colocación del dispositivo electrónico. Flores Leyes también ha ordenado la prohibición de consumo de cualquier tipo de estupefacientes y/o bebidas alcohólicas, y una restricción de acercamiento entre el agresor y la víctima.
Las medidas fueron emitidas este martes por la mañana en la continuidad de la audiencia de formulación de cargos realizada el 18 de febrero pasado. En caso de que el acusado no cumpla con la prisión domiciliaria o con algunas de estas disposiciones, se realizará una nueva audiencia, pero esta vez por incumplimiento de una orden judicial.
El viernes 17 de febrero pasado, el joven apuñaló con un cuchillo a su padre, en el barrio Telepostal de la ciudad San Luis, y le ocasionó heridas en el sector del estómago, colon, intestino y baso.
En la audiencia de formulación de cargos, realizada 24 horas después, la Fiscal María del Valle Durán imputó al agresor por el delito de “Tentativa de homicidio calificado por el vínculo” y solicitó 120 días de prisión preventiva. La defensa del acusado, representada en ese momento por la Defensora Oficial Nadia Agúndez, pidió prórroga de ocho días, medida que fue concedida por el juez.
Dicho plazo se cumplió hoy, por lo que se retomó la audiencia. El imputado se presentó con el abogado Putelli, quién solicitó para su defendido la prisión domiciliaria, la tobillera electrónica, la autorización para que realice un tratamiento ambulatorio y una prohibición de acercamiento entre padre e hijo.
La fiscalía, por su parte, representada por Durán y la fiscal adjunta Claudia Heit, luego de escuchar los argumentos de la defensa y de entrevistarse con la víctima, desistió de la prisión preventiva, pero solicitó que la domiciliaria sea controlada periódicamente y monitoreada con una tobillera electrónica. Y que se autorice la salida de la vivienda para que el joven realice un tratamiento. Además, pidió escuchar en la audiencia a la madre del acusado.
La madre del acusado dijo que están buscando un internado para su hijo y se mostró dispuesta a tenerlo en casa hasta entonces.