El dengue es una enfermedad viral transmitida principalmente por mosquitos del género Aedes. Se estima que cada año, se producen aproximadamente 400 millones de infecciones en todo el mundo, con una prevalencia mayor en regiones tropicales y subtropicales. Aunque la transmisión del virus del dengue se produce principalmente a través de la picadura del mosquito, también existen casos de transmisión materna del virus.

La transmisión materna del virus del dengue se produce cuando una madre infectada transmite el virus a su hijo durante el embarazo o el parto. Los estudios realizados sobre este tema indican que la tasa de transmisión vertical es relativamente baja, con una incidencia de entre el 1% y el 5%. Sin embargo, es importante destacar que la transmisión materna del virus del dengue puede tener graves consecuencias para la salud del recién nacido.

Los bebés infectados por el virus del dengue durante el embarazo pueden nacer prematuramente y presentar un bajo peso al nacer. Además, también pueden sufrir de sufrimiento fetal, lo que puede llevar a problemas de desarrollo y neurología. En casos graves, la infección por el virus del dengue puede incluso provocar la muerte fetal.

El momento en que se produce la infección durante el embarazo parece estar relacionado con el riesgo de transmisión materna. Se ha observado que la probabilidad de transmisión del virus del dengue es mayor si la madre se infecta durante el tercer trimestre del embarazo. Por otro lado, la transmisión materna también puede ocurrir durante el parto, especialmente si la madre presenta síntomas de la enfermedad en el momento del parto.

Es importante destacar que, aunque la transmisión materna del virus del dengue es una complicación grave, la mayoría de los bebés nacen sanos y no presentan problemas de salud a largo plazo. Sin embargo, es fundamental que las mujeres embarazadas tomen medidas para evitar la exposición a los mosquitos y reducir el riesgo de infección por el virus del dengue.

Aunque la transmisión materna del virus del dengue es poco común, puede tener graves consecuencias para la salud del recién nacido. Por ello, es importante que las mujeres embarazadas tomen medidas preventivas para evitar la infección por el virus del dengue y reducir el riesgo de transmisión vertical del virus.

Fuente: Organización Mundial de la Salud.